¿Qué va a cambiar en el pago de impuestos para los autónomos?

El Gobierno modificará la forma de tributar para autónomos en los próximos meses. Los trabajadores del sector del transporte serán algunos de los principales afectados por la reducción del límite de facturación.

El pago de impuestos ha sido, desde los últimos años, un quebradero de cabeza para los autónomos españoles, principalmente por dos motivos: porque existe confusión entre las diferentes formas que existen para hacerlo y también porque cada vez se han reducido más los límites de facturación que implican cambiar de una forma a otra. Además, desde los últimos años, el sistema de tributación por módulos está experimentando continuas modificaciones.  Pero no es el único sistema, ¿quieres saber cuáles existen?

Estimación directa

Tiene que ver con la relación entre los beneficios obtenidos por el autónomo y la base de su cotización. Es decir, el pago de impuestos estará relacionado con los ingresos y los gastos de cada uno. Se trata de un sistema mucho más “real”, pues tiene en cuenta el verdadero rendimiento de cada particular y, de esta forma, se paga en relación a esto. Parece ser el método más efectivo cuando empiezas a desarrollar una actividad económica e incluso si tu actividad es deficitaria en ciertos momentos porque no tendrás que pagar nada.

Tributación por módulos

La cuota que se paga como base de cotización es fija. Se calcula anualmente en base a parámetros como el tipo de actividad, si hay otros trabajadores a cargo, si el autónomo dispone de un local, vehículos, etc. Sin embargo, tiene una desventaja importante: la cantidad a pagar es siempre la misma con independencia de los beneficios que se hayan obtenido. Es un sistema mucho más sencillo y que no exige un control exhaustivo de todas las cuentas, pero genera dificultades a la hora de estimar los ingresos y más si son superiores a los que planeabas.

¿Qué pasará en el futuro más cercano?

En los últimos años, el Ministerio de Hacienda ha introducido diversas modificaciones que han que ha tenido como principal consecuencia la reducción del número de autónomos que pueden acogerse al sistema de tributación por módulos, así como también es menor el número de actividades que pueden acogerse a este sistema. En los dos últimos años, 2016 y el actual 2017, la cantidad máxima de facturación para cambiar el tipo de tributación se ha establecido en 125.000 euros. Sin embargo, el gobierno parece decidido a realizar una modificación significativa: a partir de enero de 2018, con la nueva reforma, solo podrán tributar por módulos todos aquellos transportistas autónomos que no facturen más de 75.000 euros en cada ejercicio.

¿Cómo afectará al transporte?

A sus 56 años, Joaquín Carrascosa lleva más de 40 trabajando entre camiones. En este momento hace rutas nacionales y alguna internacional. No cabe duda de que la experiencia obtenida a lo largo de estos años, le permite conocer a la perfección un sector que últimamente le genera una sensación extraña: por una parte, continúa la pasión y el cariño por un ambiente en el que ha se ha criado y, por otra parte, la decepción, la indignación e, incluso, cierta resignación por “todo” lo que rodea al sector. Modificaciones legislativas, empresas deslocalizadas con conductores trabajando a bajo coste…diversos frentes que hacen de trabajar en transporte un reto difícil.

“El tema de los módulos es muy complicado porque la gente también defrauda y se aprovecha… el problema real viene porque este gobierno y los anteriores no inspeccionan y la gente hace fraude”, así señala Joaquín uno de los problemas más importantes de este sistema de tributación. “El autónomo siempre ha sido familiar, estaba el padre y luego lo cogía el hijo o el hermano, eran 2 o 3 personas como máximo, pero llegó un momento en que todo esto se desmadró”, añade Carrascosa.

Sin embargo, Joaquín prefiere no quedarse ahí y propone algunas ideas para mejorar el sistema. “El módulo deberían dejarlo pero solamente con un autónomo y un solo vehículo”. Además,  Joaquín cree que los tramos de cada módulo deberían estar adaptados a las cargas y los recorridos que hace cada uno y, en ese sentido, considera que la inspección debe ser constante: “Si lo haces mal, te vamos a sancionar y te vamos a obligar a ir a directa”, sentencia.

La principal preocupación de Joaquín radica en que: “no solo se van a cargar a 20.000 pequeños empresarios o autónomos de forma directa, con los afectados de forma indirecta serán casi 30.000”. Pero si el gobierno no cambia de opinión y se ve afectado, este autónomo tiene claro lo que hará: “Yo tengo que vivir y trabajar. Si me tengo que deslocalizar, si me quitan el módulo, lo haré. No pagaré impuestos en España, no pagaré seguridad social y seguiré trabajando”, afirma convencido.